Excursión en el Castillo de Teayo
Una vez que ya desayunaste en Tuxpan unos deliciosos bocoles rellenos de queso o de huevo, bañados con una rica salsa de chile seco o de jitomate, o bien un sabroso plato de zacahuil –ese tamal enorme que se come en la Huasteca– acompañados de un café de la región, qué te parece irte de tour a Castillo de Teayo, otro lugar cercano al puerto de Tuxpan que es un legado de las culturas prehispánicas, llamado así por su pirámide, conocida como el Castillo. Aquí tuvo uno de sus principales centros la cultura huasteca, que junto con la náhuatl poblaron esta región prácticamente desde la Barra de Cazones hacia el sur de Tamaulipas.
Esta ciudad estuvo habitada sobre todo en los siglos X al XII, cuando tuvo su mayor florecimiento y se convirtió en una de las principales urbes de la región, pues ahí se levanta una de las pocas pirámides de la cultura huasteca que se conocen, aunque ésta claramente muestra un estilo arquitectónico de indudable influencia tolteca; se sabe además que los mexicas o aztecas también tuvieron presencia un poco antes de la llegada de los españoles al nuevo mundo.
Aparte del Castillo –como lo llamaron quienes descubrieron este edificio en el siglo XIX– en el poblado llamado precisamente Castillo de Teayo hay un museo de sitio, donde se exhiben piezas de las culturas huasteca y mexica, principalmente, además de una serie de esculturas monolíticas que se levantaban en los alrededores del basamento piramidal, las cuales son de diferentes estilos y con variadas representaciones, por lo que es otro lugar de visita obligada si haces el tour en esta población.