Tours al aire libre en Montreal

Uno de los tours al aire libre que no puedes dejar de realizar es una Caminata por el Viejo Montreal. Esta zona de la ciudad está llena de historia y de edificios y lugares emblemáticos. Aquí podrás conocer el ayuntamiento de la ciudad, algunos museos impresionantes y. por supuesto, la Basílica de Notre Dame (una joya arquitectónica). Tanto si lo haces con un guía especializado como si no, no te puedes perder este recorrido por la parte más antigua de la ciudad. Toda una aventura.

Hay personas que son muy activas físicamente y que gustan de realizar actividades al aire libre. Si tú eres así,  en Montreal tendrás la oportunidad de conocer la ciudad a bordo de una bicicleta. Sí, aunque no lo creas, aquí puedes realizar dos tipos de tours en bicicleta.

Está el Tour en bicicleta por el circuito Sur esencial Montreal. En este puedes conocer gran parte de los sitios más hermosos de la ciudad, como algunas zonas del Viejo Montreal y la Universidad Mc Gill, además de muchos parques con áreas verdes hermosas.

Y hablando de parques, también puedes realizar el Tour en bicicleta de Parques y Callejones Escondidos en Montreal. Si eres un apasionado de la aventura, entonces esta es la opción para ti. Con la ayuda de un guía, recorrerás los mejores parques, así como también algunos de sus barrios más llamativos como el Mile – End y Outremont. En estos podrás adentrarte hasta en sus veredas más estrechas y conocerlos a fondo.

Por supuesto, no puedes dejar de visitar los mercados locales y los sitios gastronómicos más concurridos por los habitantes. Te aseguramos que allí probarás las muestras más deliciosas de la gastronomía canadiense.

Este tipo de tours te permiten disfrutar de un día relajado, sin mucho estrés, en el que puedes conocer la ciudad a tu ritmo, sin prisas, visitando cada pequeño rincón. No olvides llevar tu cámara lista para que captures cada momento y te lleves un hermoso recuerdo a casa.

Definitivamente que un Tour por Montreal al aire libre es una experiencia única e irrepetible. Así que, no lo pienses más, vístete cómodo, ponte tus zapatos de caminar y prepárate a experimentar Montreal de cerca, como muy pocos se atreven a hacerlo.