Excursión a la danza de los Voladores
Aparte de la vainilla tan celebrada, Papantla tiene otra joya, que incluso fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco: la Danza de los Voladores, que si bien no es exclusiva de la Ciudad que perfuma al mundo, sí los Voladores de Papantla fueron quienes la dieron a conocer fuera del Totonacapan, de ahí que mucha gente incluso piense que este ritual es particular de esta zona.
Este ejercicio sagrado consiste en que cinco ‘voladores’ se suben a un poste que por lo general tiene poco más de 20 metros de altura, cuatro de ellos amarrados a una soga y quienes se sientan frente a cada uno de los puntos cardinales, mientras en quinto, llamado caporal, toca sones especiales para la ocasión con su flauta de carrizo y un pequeño tambor, al tiempo que baila en las alturas, ¡en verdad es alucinante ver cómo da vueltas sobre sí mismo al ritmo de la música en el reducido espacio de la punta del palo!
Después de un determinado lapso los voladores, al unísono, inician el descenso, son 13 vueltas las que tienen que dar al palo para llegar al piso en un rito espectacular que tiene que ver con la fertilidad y los tiempos de siembra. En Papantla, podrás tomar un tour en compañía de tus seres amados y ver su atrevido acto frente a la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (colocar URL 3), en pleno centro de la ciudad. Así, después de admirar a estos hombres-pájaro, puedes disfrutar de una rica agua de frutas, un licor de vainilla propio de la región o de un raspado de la misma, que te refresque del intenso calor que suele sentirse en esta región. ¿Qué te parece?