Narva, Estonia.

 

Esta pequeña y curiosa ciudad de Estonia  se ha desarrollado alrededor del castillo de Hermann llamado también en Castillo de Narva La ciudad  ha cambiado varias veces de manos pues perteneció luego al Imperio sueco, y también al imperio Ruso para independizarse en 1991 con la caída de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas.

Se considera que la fundación oficial de Narva  fue en 1345 siendo desde entonces un enclave fronterizo que la hizo ser objeto de muchas guerras, pues se convertía en un punto estratégico para dominar los países subyacentes. Por mucho tiempo fue dominada por Alemania durante la primera guerra mundial, donde el castillo fue tomado como una base militar.

Narva fue bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial y quedó casi totalmente destruida, debido a ello los pocos sobrevivientes huyeron hacia poblaciones cercanas  por lo que los soviéticos la  han repoblado  con personas de otras repúblicas que han venido atraídas por la gran cantidad de industrias presentes en la ciudad. 

Actualmente  es la tercera ciudad más poblada de Estonia, donde puedes encontrar inmigrantes de muchas naciones lo que le da ese aire de ciudad cosmopolita pero con el maravilloso paisaje campestre que rodea cada uno de sus parajes, un contraste absolutamente fascinante que se constituye en el orgullo de los lugareños por lo que no puede faltar en tu itinerario si tomas una Excursión por Estonia.

Entre 1945 y 1991 la ciudad de Narva fué totalmente reconstruida con edificios y obras de arte de inspiración soviética como se puede notar en el Monumento a Paul Keres el mejor ajedrecista de Estonia y en la Galería de arte de Narva, que encierra las mejores pinturas de los países bajos. No puedes perderte estos dos lugares representativos en  la maravillosa ciudad de Narva, pues te darán unos paisajes de fotografía sin igual.