Maribor, Eslovenia.
Es la segunda ciudad más grande de Eslovenia, con cerca de 100.000 habitantes, y también es la capital de su respectiva región. Es conocida por su amplia historia local, lo que le da una gran riqueza cultural. En el año 2012 fue elegida capital cultural de Europa, junto con Guimarães en Portugal.
Su historia comienza en la edad media, donde se empezó a definir la alta inferencia que tuvo el pueblo alemán en la cultura y costumbres de la ciudad, pues gran número de austro-alemanes vivían asentados allí. En sus inicios, era apenas un mercado de granjeros que vivían en las afueras del castillo, que poco a poco creció y se ganó a pulso su derecho de pueblo libre, lo que le confería derechos de comercio y cierta autonomía en su gobierno.
El castillo, construido justo sobre la ciudad, soportó múltiples intentos de invasión, pero no pudo ser tomado ni siquiera por el imperio otomano en su campaña de expansión territorial durante los siglos XVI y XVII. A inicios del siglo XIX, la gran mayoría de habitantes eran ciudadanos austriacos, mientras que los eslovenos locales vivían en aldeas y pueblos en las afueras de la ciudad.
La historia de Maribor fue especialmente conocida durante la época de ambas guerras mundiales; debido al número de habitantes austriacos durante la Primera Guerra Mundial, las demás etnias empezaron a sufrir cierta persecución, ya que no confiaban en ellos. Eso genero una ruptura entre ambos grupos étnicos y por esto, posterior a la caída del Imperio austrohúngaro, la ciudad fue reclamada por grupos independentistas eslovenos. Los austriacos, posteriormente intentaron retomar la ciudad por las armas, pero sus intentos fueron frustrados por los grupos de partisanos locales.
Una fecha clave que disparó los problemas étnicos entre ambos grupos fue el 27 de enero de 1919, donde bajo circunstancias poco claras, un grupo de tropas eslovenas abrieron fuego contra ciudadanos austriacos desarmados que esperaban una resolución a su situación por parte de Estados Unidos y su delegación para la paz. Ambos grupos claman la culpabilidad del otro, pero lo que sí se sabe es que 9 ciudadanos murieron y cerca de otros 20 resultaron heridos de gravedad. Esta fecha es conocida como el Domingo Sangriento de Maribor.
A partir del fin de la Primera Guerra Mundial, poco a poco los ciudadanos austriacos empezaron a abandonar el país en un éxodo masivo, cerrando escuelas, tiendas y organizaciones. Esto se realizó bajo órdenes de Yugoslavia, que buscaban disminuir el sentimiento nacionalista de los austro-alemanes en este territorio, del mismo modo que estos persiguieron a los grupos eslavos unos años atrás. Sin embargo, esta situación cambio durante la llegada de la Alemania Nazi.
La situación durante la Segunda Guerra Mundial fue similar, pero más violenta, ya que la Maribor ocupada por alemanes fue objetivo de bombardeos constantes por parte del ejército aliado, causando múltiples bajas civiles. La ciudad sufrió de constantes problemas económicos, ya que la inestabilidad política de los países a su alrededor y en el propio durante la guerra fría también afectó en gran medida el crecimiento de la ciudad.
Hasta hace poco la ciudad tenía grandes problemas de desempleo, pero un plan de industrialización y fortalecimiento del turismo permitió que la ciudad saliera adelante. Este lugar lleno de historia y arquitectura demostró salir adelante, y su profunda riqueza cultural es algo que los turistas disfrutan conocer. Un ejemplo de estas cosas que las personas aman conocer sobre Maribor es la Colina de la Pirámide , un lugar común para las excursiones en familia. Se trata de una colina poco empinada y con relativa plenitud, que invita a locales y extranjeros a disfrutar de sus paisajes luego de una corta excursión desde la ciudad.
Otro lugar histórico bastante famoso es la Casa Old Vine , donde se encuentra la vid más antigua del mundo, que se dice que lleva más de 400 años extendiendo sus raíces. Antiguamente, esta casa hacia parte de la muralla exterior de la ciudad, pero hoy en día funciona como un café y lugar de relajación luego de largas jornadas de tours en los alrededores.
También es muy recomendable visitar el Museo Regional de Maribor , ubicado en el Castillo de Maribor. Es posible planear excursiones en ambos lugares, ya que se encuentran en secciones separadas del mismo edificio, lo cual resulta muy conveniente. Aquí se encuentran muchas colecciones importantes para la historia y el folklor local.