Expedición al museo de la reina Victoria
La fuerza, la contundencia, la personalidad inquebrantable y, por supuesto, el buen gusto, de la reina Victoria se ven plasmados en la colección de arte exhibida en el museo que se creó en 1891 y que ha sabido renovarse para permanecer aggiornado a los diversos públicos actuales.
Excepto que justo quieras ir al museo en Viernes Santo o en Navidad, podrás hacerlo sin ningún problema entre las diez de la mañana y las cuatro de la tarde.
¿Qué esperar encontrarse en una visita a un museo más que piezas obsoletas y un ambiente aburrido? Si esa es tu idea de museo, tenemos interesantes novedades para contradecir, con evidencias, tal concepción.
El museo de la reina Victoria te invita a comenzar tu recorrido desde la palma de tu mano, ya que ofrece una brillante colección online para que lo vayas conociendo desde antes de entrar.
Una vez que cruzas su umbral, tendrás a tu disposición colección de artes visuales, de la historia de Tasmania y de ciencias naturales. Una vez que las hayas visto todas, puedes darte una vuelta por el planetario que está dentro de las instalaciones de museo y que nada tiene que envidarle al firmamento mismo. Por supuesto que hay una tienda llena de libros para que elijas tus favoritos para llevarte a casa, así como también exhibiciones temporales.
Para que no te pierdas de nada cuando llegue la hora de almorzar o del té, el museo cuenta con un fantástico restaurante y con un salón de té con toda clase de propuestas en bebidas calientes e indulgencias dulces.
A esta altura seguramente te estarás preguntando cuántos dólares deberás invertir para entrar en un lugar tan completo, pero nuevamente para tu sorpresa, las entradas en el museo de la reina Victoria son completamente gratuitas. Tal vez esto compense el hecho de que no hay excursiones en español.
Ahora nos iremos a vivir toda una aventura en una expedición a Cataract Gorge.