Monasterio del Escorial y Valle de los caídos, dos complejos a las afueras de Madrid

Madrid es una bella ciudad, muchos turistas se centran en todo el legado de arte y cultura que encierra y envuelve; sin embargo, a las afueras de esta fenomenal capital española encontramos dos complejos turísticos de suma importancia histórica: El Monasterio del Escorial y el Valle de los caídos. 

Monasterio del Escorial: emblema de poder español 

Este complejo arquitectónico se encuentra ubicado lejos de la zona centro madrileña. Este monasterio fue construido durante el reinado de Felipe II en el siglo XVI, los historiadores mencionan que se construyó como monumento conmemorativo a la victoria española sobre los franceses en la Batalla de San Quintín en 1557. Aunque, también es importante mencionar que el rey Felipe deseaba enterrar en este lugar a su padre, Carlos I. 

Este monasterio es una obra maestra de la arquitectura renacentista y es uno de los sitios turísticos más visitados en España. El complejo consta de varias secciones, incluyendo un palacio real, una basílica, una biblioteca y un monasterio.

Uno de los sitios más importantes dentro del monasterio es la Sala de las Batallas, con importantes frescos que representan las victorias militares españolas; un sitio increíble es la Biblioteca, con más de 40,000 manuscritos y libros de toda índole, esta preciosa sala de sabiduría estuvo exenta de la inquisición española, por lo que aquí encontraremos libros sumamente interesantes. Y por supuesto encontraremos La Capilla Real; lugar de descanso de reyes y reinas españolas, incluyendo a Felipe II.

El Monasterio del Escorial también es conocido por su impresionante colección de arte y objetos históricos, que incluyen pinturas, esculturas y tapices de algunos de los artistas más famosos de la época.El complejo está rodeado por un hermoso paisaje de montañas y bosques, y es un lugar ideal para pasear y explorar los jardines y fuentes que se encuentran en sus terrenos.

Este es un lugar fascinante para visitar en las afueras de Madrid, una muestra impresionante de la arquitectura y la historia española, donde encontrarás grandes tesoros históricos y culturales. 

Valle de los Caídos: homenaje a los ausentes en pie de lucha 

En la Sierra de Guadarrama, a unos 50 kilómetros al norte de Madrid, encontramos el Valle de los Caídos; un monumento construido entre 1940 y 1959 por orden del dictador Francisco Franco, como forma de honrar a los caídos durante la Guerra Civil Española.

Y es que el Madrid de Franco es diferente; una ciudad llena de nostalgias, traiciones y muerte. La Madrid franquista no solo la vemos en las novelas de Almudena o de Chacón; la seguimos encontrando en monumentos como este. 

Lo que caracteriza al Valle de los Caídos es una enorme cruz de piedra de granito, con 150 metros de altura, que ni aún con ese vuelo logra redimir los pecados de la guerra. En este complejo arquitectónico también se encuentra una basílica, una cripta y una abadía benedictina. 

La basílica es una impresionante obra de arquitectura y contiene frescos, mosaicos y esculturas de algunos de los artistas más importantes de la época. Aquí también se encuentra una cripta subterránea, y justo, frente al altar mayor, están los restos de Franco. Además de 33,000 personas enterradas, la mayoría soldados que murieron durante la Guerra Civil, aunque también hay restos de personas que murieron en ambos lados del conflicto.

Este valle ha sido objeto de controversia desde su construcción debido a su conexión con el régimen franquista y la forma en que se trata la memoria histórica en España. Desde la muerte de Franco en 1975, ha habido un debate sobre si el monumento debería ser demolido o reconvertido en un lugar de memoria y reconciliación.

Con lo que estamos de acuerdo es que este complejo es un lugar de interés para visitar por su importancia histórica, su bella arquitectura, sobre todo por su contexto histórico y las controversias que rodean su construcción.

Recuerda que Madrid es tan grande e importante, y en todo su alrededor encontraremos preciosas joyas arquitectónicas que guardan dentro de ellas más tesoros ocultos.