Monasterio de la Rábida
La historia del Monasterio de la Rábida está ligada al descubrimiento de América, a la conquista y a la demostración de la teoría de la esfericidad de la tierra. Ubicado al sur de la ciudad, en la ribera del río Tinto, incluye una serie de atractivos históricos y culturales.
Una de las más visitadas atracciones del Monasterio de La Rábida es su capilla donde se halla la imagen de Nuestra Señora de Los Milagros. La pequeña estatua, de alabastro y del siglo XIV, se cree que estuvo sumergida en el fondo de la ría de Huelva, mientras los árabes ocuparon la península Ibérica. Luego, los pescadores la rescataron.
Con esa fama, la virgen es Patrona de la Rábida y de Palos de la Frontera. Ante ella, Cristóbal Colón oró con sus marineros pidiendo protección antes de salir en el viaje que culminó con el Encuentro de Dos Mundos, el 12 de octubre de 1492. Justo de ese viaje hay un recuerdo fundamental en La Rábida.
Además de muchos documentos, el primer mapamundi que muestra el contorno de América, y objetos relacionados con Colón, están las réplicas de las Tres Carabelas: la Pinta, la Niña y la Santa María. Sobre un estanque, en el llamado Muelle de Carabelas, son la reproducción exacta de las naves que surcaron el Atlántico hacia lo desconocido.
La Rábida está rodeada de un hermoso parque, muchas áreas verdes, el Muelle de la Reina, restaurantes y cafés. Está también un centro cultural, el Foro Iberoamericano, un anfiteatro al aire libre; y varios monumentos. A lo lejos se ve el Puente sobre el Río Tinto, y su famoso Muelle de Tinto.