Cataratas Curtis
El entorno de las cataratas Curtis es ideal para practicar senderismo en todos los niveles de esta actividad. Puedes comenzar a dar tus pasos de forma discreta y, si más tarde te aburres, accedes a las zonas más escarpadas y desafiantes. Las chispeantes aguas se encuentran dentro del marco del Parque Nacional Tamborine, un espacio pensado para proteger a las plantas nativas de la montaña del mismo nombre. Allí encontrarás palmeras, eucaliptos y frondosos helechos.
Dentro de los bosques que albergan las cataratas Curtis, se puede hacer observación de aves exóticas y captar alguna instantánea cuando te topes con un representante de la fauna autóctona.
La maleza puede ser hasta más alta que tú, así que te recomendamos evaluar el lugar en el que decidirás adentrarte.
¿Por qué se generaron las cataratas? Porque hace aproximadamente veintitrés millones de años las erupciones volcánicas tallaron las rocas y le dieron un destino y una función al agua de la zona. Si ves algo que brilla, no te asustes, son los gusanos luminosos que proliferan en la zona de piscinas de roca basáltica.
Llévate un abrigo liviano, ya que el microambiente de la selva tropical genera un importante descenso de temperatura a medida que te acercas a su epicentro.
Para un paseo más soleado y abierto, nos iremos a la Playa Surfers Paradise en la cual el sol y las olas son parte del trato.