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Abr 24, 2023

La Roma Antigua

 

La Roma Antigua fue una civilización que se desarrolló en la península itálica desde el siglo VIII a.C. hasta el siglo V d.C. La ciudad de Roma se fundó en el año 753 a.C. y se convirtió en el centro del poder romano. Durante su apogeo, el Imperio Romano llegó a abarcar gran parte de Europa, Asia y África.

 

La Roma Antigua es conocida por sus logros en el arte, la arquitectura, la literatura, el derecho y la tecnología. También es famosa por sus líderes y emperadores, como Julio César, Augusto y Trajano, quienes expandieron el imperio y lo llevaron a su máxima extensión.

 

Entre los monumentos más famosos de la Roma Antigua se encuentran el Coliseo, el Foro Romano, el Panteón y el Arco de Constantino. La ciudad también era famosa por sus acueductos, que suministraban agua potable a la ciudad, y por su red de carreteras, que conectaban las distintas partes del imperio.

 

Su historia 

 

La historia de la antigua Roma comienza en el año 753 a.C., cuando la ciudad de Roma fue fundada, según la leyenda, por los hermanos Rómulo y Remo (Se cuenta que los hermanos Rómulo y Remo eran hijos del dios Marte y la princesa Rea Silvia.). Durante los siglos siguientes, Roma se convirtió en una potencia regional en Italia y estableció su dominio sobre otras ciudades-estado.

 

En el año 509 a.C., Roma se convirtió en una república, con un gobierno dirigido por dos cónsules y una asamblea popular. Durante la República, Roma continuó expandiendo su territorio a través de guerras y conquistas, y también experimentó una serie de conflictos internos entre las diferentes facciones políticas.

 

En el año 27 a.C., el líder militar Augusto se convirtió en el primer emperador de Roma y estableció el Imperio Romano. Anteriormente, fue conocido como Octavio, quien a su vez era el sobrino nieto de Julio César y heredó su poder tras la muerte de éste en el año 44 a.C. Durante los siglos siguientes, el imperio se expandió para abarcar gran parte de Europa, Asia y África.

 

El Imperio Romano alcanzó su máxima extensión territorial durante los siglos II y III d.C., pero luego comenzó a declinar debido a una combinación de factores, como la corrupción, la inestabilidad política, la invasión de los bárbaros y la decadencia cultural. En el año 476 d.C., el último emperador romano, Rómulo Augústulo, fue depuesto por los bárbaros, y esto marcó el final del Imperio Romano de Occidente.

 

A pesar del declive y la caída del Imperio Romano de Occidente, el Imperio Romano de Oriente, también conocido como el Imperio Bizantino, continuó existiendo hasta el siglo XV, cuando fue conquistado por los turcos otomanos, un imperio islámico que se originó en Anatolia (la actual Turquía) en el siglo XIII y llegó a su apogeo en los siglos XV y XVI. El legado de la antigua Roma ha perdurado hasta nuestros días en áreas como la arquitectura, el derecho, la literatura y la política.

 

A pesar de que la Roma Antigua llegó a su fin en el siglo V d.C., su legado ha perdurado hasta nuestros días y ha influido en la cultura, la política y la sociedad de todo el mundo occidental.

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