Martin, Eslovaquia.

 

La ciudad de Martin en el norte de Eslovaquia se caracteriza por sus fríos inviernos y sus cálidos veranos; su cercanía a las montañas del norte hace de este sitio un lugar lleno de paisajes hermosos sin importar la época del año. Con cerca de 60.000 habitantes, este lugar lleno de vida y color ofrece múltiples actividades que son enormemente atractivas tanto para turistas como para locales.

Se dice que fue fundada en la edad media, cuando era un pequeño pueblo de comerciantes y artesanos. A partir de este momento la historia del pueblo fue algo turbulenta, pues continuamente era saqueada e invadida por distintos grupos étnicos; incluso en una ocasión, en 1433, la ciudad fue enteramente quemada por invasores husitas, y apenas 10 años después de esto un terremoto volvió a destruir la ciudad.

Esto truncó en gran medida el ritmo de crecimiento que el pueblo tenia, que incluso le había otorgado su carácter de pueblo real, de manera que durante cierto tiempo estuvo bajo el dominio de una familia noble húngara. A pesar de este gran número de contratiempos, la ciudad continuó su crecimiento y su desarrollo cultural, lo que posteriormente causó que tuviera un aumento acelerado en sus actividades económicas y culturales.

Un ejemplo de esto es que durante el siglo XIX aquí se fundaran múltiples instituciones de carácter cultural, como museos e instituciones de investigación, que a su vez aceleraron el proceso de industrialización local, por lo que la ciudad estaba a la par con las grandes capitales de Europa en cuanto a este tipo de desarrollo. También, debido al grado de educación de sus habitantes, Martin fue pionera en cuanto a movimientos políticos que buscaban la emancipación nacional de influencias extranjeras.

Martin es hoy por hoy la capital cultural de Eslovaquia, y es el hogar del museo nacional eslovaco; esto se junta con el hecho que es una ciudad histórica y llena de conocimiento sobre la cultura local desde hace muchos siglos, y obtenemos una ciudad enormemente turística. También, debido a su cercanía con las montañas Malá Fatra y Vel’ká Fatra, durante ciertas épocas del año Martin se convierte en un lugar predilecto para practicar el ski. La ciudad más cercana a Martin es Zilina, que también es un importante centro turístico del norte de Eslovaquia, y se encuentra a tan solo 30 kilómetros.

En la actualidad, Martin es una ciudad muy importante para la economía nacional debidu a su alto nivel de industrialización; aquí tienen sus sedes subsidiarias grandes compañías tales como Volkswagen, ECCO y Neografia, cada una con sus instalaciones en las afueras de la ciudad y ofreciendo muchos empleos valiosos para las personas locales. A pesar de la fuerte recesión que golpeó al país durante 2008, la ciudad poco a poco se recuperó y la tasa de desempleo que llegó a ser del 10% ahora se encuentra poco más por encima del 4%.

También es importante resaltar que en la ciudad, al ser un lugar histórico en Eslovaquia y Europa, también cuenta con numerosos puntos de interés para las personas que les interese conocer más sobre el lugar. Un ejemplo de esto es la iglesia de San Martin de Tours, considerada el edificio más viejo de la ciudad, y que representa un estilo románico que predominaba en la edad media.

También, si hablamos de lugares culturalmente relevantes en Martin, debemos mencionar el Museo de la aldea Slovak , que es un museo al aire libre que ofrece tours en sus instalaciones para todos aquellos que deseen conocer sobre la historia y artesanía locales.

Del mismo modo, el Cementerio Nacional que podemos encontrar en la ciudad hace parte también de los puntos de interés; aquí yacen múltiples personalidades relevantes para la historia y la cultura local y nacional, por lo que a menudo los turistas realizan excursiones en este sitio para hacer un recorrido histórico conociendo sobre estas figuras celebres.

Otro museo que tiene una gran importancia a nivel nacional es el Museo Nacional de Eslovaquia , ubicado en Martin, y que está profundamente ligado al museo antes mencionado. Fundado a finales del siglo XIX, este museo contiene mucha información y conocimiento antropológico de la región, por lo que es común encontrar turistas que hacen excursiones desde otras ciudades a conocerlo.